Avanzar,
y los pasos enraizados, ligeros en volátil caminar,
tan livianos…, semejantes a volar. ES VOLAR.
Avanzar,
y los pasos Siempre firmes, son sentirte y caminar,,
palpitarme en agua dulce por los ojos y soñar. ES SOÑAR.
Avanzar,
y los pasos matizando nuestro otoño en la ciudad,
sin andar,
con las manos enlazadas y enraizadas, paso a paso, como amar.
ES AMAR.
Cillán M.
“Sietes de agua dulce”